Cúpula del ángel {Relato Corto}

¡Buenos días!
Lamento publicar tan tarde hoy, pero ha coincidido que al despertar scrivener me pedía actualización y estuvo un buen rato instalando, para luego leer que en Asturias se habían cancelado operaciones por falta de sangre, en especial cero positivo (mi tipo además) y correr al centro de donantes.
Por suerte los asturianos han reaccionado bien y había tanto overbooking que al vivir cerca he decidido pasarme otro día, porque había más de una hora de espera y tampoco quería que me pillase justa para ir a clase. Da gusto ver que estás en una comunidad con gente altruista que reacciona rápido en una situación así.
Pero bueno, dejemos el modo altruista de hoy.
Seguimos con Angie y Nir como bien sabéis, y hoy os hablo de un hechizo de ángeles muy interesante y os dejo con un final bastante intenso. El miércoles que viene más ;)
 El capítulo anterior está aquí y aquí tenéis todo el listado de capítulos.
¡Espero que os guste!



Era la primera vez que salia de caza, y no sabia ni por donde empezar. Me vestí como siempre con aquella ropa que se me pegaba al cuerpo como una segunda piel, dándome libertad de movimientos, y seguí a Joanne hasta la habitación en la que tenían las armas.
-¿Qué tengo que coger?- Pregunté, insegura. Había entrenado con todas las armas de aquella sala, y sabía que cada una de ellas tenía una propiedad distinta y se empleaba para un enemigo concreto. No me había sido muy difícil aprenderme todas esas armas. A fin de cuentas, ya las conocía de antes. Sin embargo no era algo de lo que me gustaba ir alardeando, podría acarrear demasiadas preguntas, y no quería alarmar a nadie.
-Coge una de esas dagas, y puede que una pistola. Vamos a cazar ángeles.


Sé que se debería haber encogido mi estómago o que tendría que haberse acelerado mi pulso, pero solo podía pensar en qué pasaría si el ángel me reconocía.
Obedecí, guardando la daga en su funda y colgándola de mi cinturón, y recogiendo la pequeña pistola que me ofrecía mi jefe. Tardamos poco en estar todos preparados, y pude ver que éramos muchos. Hice cálculos, pensando en la idea de emplear alguna estratagema la próxima vez que tocara cacería para quedarme y liberar a Nyla. Incluso pensé en la posibilidad de mantener a ese ángel con vida y que me ayudase.
Tras un viaje de aproximadamente una hora de coche, me encontraba en un callejón de una zona que me conocía demasiado bien. Sé que tendría que estar histérica, pero solo podía pensar en que mi hermano estaba oculto junto a Nir y que a nadie en su sano juicio se le ocurriría atacar a mis padres, ni siquiera en grupo. Pero estábamos en mi calle, en mi barrio, y si hacía un repaso general a las criaturas que vivían cerca de mi, las probabilidades de que fuera una persona conocida eran elevadas. Demasiado como para estar serena, y lo estaba.
De golpe, y tras más de un mes sin preocuparme por ello, comencé a preguntarme qué sabrían mis padres sobre mí. Y luego pensé en mi vuelta al curso escolar. Tenía poco tiempo.
- Angie, el objetivo se encuentra a tus diez- Dirigí la vista a mi izquierda preguntándome cómo podía salir de esta, y si conocería a mi objetivo.
Pero claro que lo conocía. Era Denisse, la ahijada de mi madre y algo entre una hermana y una prima para mi. La falta de alma volvió a salir en mi auxilio y con la mente tan fría como un témpano de hielo me acerqué a paso lento hacia Denisse.
-No intervengais, por favor.- Murmuré al intercomunicador, escuchando el eco de mis zapatos en el callejón a medida que me acercaba. Mientras escuchaba discrepar a algunos individuos a través del intercomunicador yo cogí el transmisor y con un fuerte tirón rompí los cables y los tiré a una esquina. El ruido sobresaltó a Denisse, quien se giró hacia mi alerta, pero luego suavizó su rostro.
- ¿Y esa ropa? ¿Vas a disfrazarse de Catwomam?- Preguntó, casi riendo.
No cambié mi expresión y cuando estábamos a dos metros solo dije una cosa.
-Cúpula del ángel, ya.
Si Denisse dudaba de mi plan, la forma en la que fulminé a la joven con los ojos debió bastarle para cambiar de idea. Siguió formulando las palabras a medida que avanzaba a ella y, cuando estaba a pocos pasos, vi a la gente alarmarse. Saqué la daga mientras esperaba no alarmar a Denisse. Ella siguió la vista del filo, pero siguió con el hechizo. La cúpula de plumas estaba casi completa y yo, con un finmo gesto, atravesé a Denisse con la daga.

http://eepurl.com/8KSCX

Comentarios

  1. ¡Hola!
    La verdad es que escribes muy bien.
    Y encima buena gente, que dona sangre cuando hace falta.
    Un beso!

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  2. :O pero y qué va a pasar?? Cómo que atravesó a Denisse con la daga...
    A veces a mí también me gustaría no tener alma y que muchas cosas no me afectaran... aunque supongo que también tendrá su parte mala... jejeje
    Me gustó este capítulo,como todos! :)
    Un besote!

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    Respuestas
    1. Jajaja lo siento por asustarte, ángela, te prometo que no va a pasar nada demasiado grave.
      Lo del alma tiene su parte mala, y bueno, por ejemplo ahora Angie no tiene poderes ni nada D:
      Espero que te guste también el siguiente, jejeje.
      ¡Un besín!

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  3. ¡¡¡¡Pero no me dejes así!!!! O.o
    Ese final me ha dejado con la boca abierta, necesito saber como sigueee
    Un besazo
    Lena

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